viernes, 16 de octubre de 2009

A night at the Opera (actually in Coslada).

Andaba yo muy feliz de camino a Nuevos Ministerios, porque había quedado con mi amigo Curlboy para tomar algo y cenar. Después de los acontecimientos (ya sabéis a lo que me refiero) del sábado aquel en ese lugar tan maravilloso, lleno de gente auténtica y buena música... cómo se llamaba... !Ah! !sí! Elástico, le dije que deberíamos vernos algún día para tomar algo a la luz del día, que últimamente sólo nos encontrábamos con alto grado de etanol en sangre. Incluso pensaba hablar de lo que pasaba por mi cabeza, e incluso sobre mis sentimientos.

Total, que nos vimos, decidimos cenar en el Ginos de Príncipe Pío (como la última vez), y acabó por convencerme con un plan para esa noche: Una fiesta en casa de una amiga suya en... Coslada (sí,donde el sheriff y los polis macizos de Pekín Exprés). Era obvio que estaba un poco lejos, que yo tenía mil cosas que hacer al día siguiente y que el alcohol "gratis" a espuertas con un montón de gente en un chalecito con piscina, cesped y habitaciones con camas de matrimonio vacías eran muy llamativos. Pero resultó que, al final, era una fiesta en un piso (mal asunto), con poca gente (asunto peor aún) y de ambientación próximo-oriental (cosa que supe cuando la anfitriona abrió la puerta vestida como una Sherezade venida a menos). Pero claro, ya en el cercanías no me pude volver atrás, y el ambiente se estaba llenando de melaza.

Al llegar a Coslada, aluciné un poco. Me recordó a estos barrios chungos que se ven por ahí en la tele a veces, y a unos barrios cerca del mío en mi tierra. Pero claro, yo es que tengo una versión estereotipada de la vida por ser majariego, XDXDXD. Allí vimos unas señoritas que parecían prostitutas (y eso que no quise hacer mi chiste de "¿preguntar es ofender?), y paré a un chico muy mono para preguntarle por la dirección. Muy simpático, dijo que estaba "un poco lejos", y yo me asusté un poco, porque eran las 12 de la noche y no quería andar. Así que le dije a Curlboy que rapidito, que quería beber.

Tardamos escasos 4 minutos en llegar, y dudando (yo no sé cómo calculan las distancias en los sitios pequeños). El piso era bonito, así con un macro patio central con dos piscinas, nos sorprendimos gratamente. Al llegar, alcohol a mansalva, gente vestida como si estuviesen haciendo una parodia de Aladín (por suerte otros muchos no estaban de esa guisa), una morena con flequillo que me llamó la atención desde el primer momento y, gran sorpresa, una cachimba encendida con tabaco aromatizado a la manzana.

La música prometía, la gente era mazo rara (sobre todo unas tipas que había por allí), los tíos unos muermos, pero hicimos buenas migas con la maciza de rojo y con algunas más (que nos preguntaron si éramos novios), así que todo fue más o menos interesante. Si no me bebí 7 no bebí ninguno, y la cachimba hizo sus efectos. Total, que ya estaba medio muerto a las 6 de la mañana, y le dije a Curlboy que me quería ir, que tenía cosas que hacer. Él dijo que perfecto, así que fui a la habitación de la anfitriona para recoger nuestra ropa de abrigo, y él entró, y cerró la puerta. No recuerdo muy bien cómo, pero de repente empezamos a besarnos bastante intensamente. Apagué la luz para disfrutar más del momento (no sé si lo hice por eso), y después de un rato:

-Young, ya, que esto no puede ser.
-Venga, vale, tranquilo, dame un abrazo y nos vamos.
-Vale. Young, el último beso.
-Nunca digas último, Curlboy. Di penúltimo.

Y nos fuimos despidiéndonos de la gente y prometiendo quedar con la de rojo y la anfitriona el próximo sábado (osease, mañana). Fuimos hablando con toda la naturalidad posible hasta el portal, habida cuenta del calentón, y, de repente, sólo con pasarle el brazo por la cintura en plan amiguitos, la torridez volvió al ambiente y comenzó a besarme, musitando: ésto está mal, no sé por qué lo hago, a lo que yo, obviamente, contesté: Porque te gusto mucho, y no desde ayer precisamente. Se ve que le convencí (porque empezamos a superar los besos), y acabamos yéndonos a un callejón de Coslada, entre un colegio y una obra pública que debía ser un auditorio o similar.

Y justo allí, cuando la faena estaba a punto de comenzar (y no os imagináis hasta qué punto, ya condón puesto y todo...), de repente, al otro lado de la verja sobre la cual estábamos inclinados, vemos como a tres metros escasos aparece un coche que nos corta el rollo (obviamente), y del que se bajan dos tíos que entran en el colegio público a saber para qué. Lo más surreal que me ha ocurrido, teniendo en cuenta que eran como las 7 de la mañana de un domingo cuyo lunes era fiesta...

Esperamos impacientemente, yo acordándome de la santa familia de los inoportunos ilegales, esperando que no apareciese el guarda de la obra por allí. Después, cuando se fueron, continuamos con lo nuestro y acabamos.

Todo muy salvaje, muy auténtico, muy contenido. Muy feliz.



PD: Cancionaza, puros 60's.

6 comentarios:

  1. Me encantan vuestros diálogos, eres un auténtico petardo XDDDDD

    Como te pasas con la pobre Coslada, pues extrarradio PURO y DURO, que te esperabas????? XD

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  2. Joder young si que aprovechas los días jajajajaj Pues me alegro de que tu fiesta oriental en Coslada tuviera un final tan interesante, pero la próxima vez bajo techo hombre que os puede ver algún desdichado!!XDD

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  3. Ay que bien cuentas las cosas!!! Parecía una peli (al principio de terror -Coslada- jajaja). Y cuando apareció el coche ¿por qué no os dio más morbo y terminábais antes?

    Mira Curlboy, con novio perfecto y todo y ahí cayó a tus pies y a los del colegio jajaja

    Me alegro muchísimo y ya puedes seguir contándonos la novela que no le falta ningún ingrediente: alcohol (jajaja), pasión, sexo, voayers, disfraces, música, personajes secundarios y una verja jajaja. Buenas vibraciones siiiiii!!!

    Beso!

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  4. ajaja, joder que peligro tienes tio, que peligro. jajajaj, así por las buenas, yo no se como os la apañáis, vas a tener que darme clases, jejejej

    Un beso cielo

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  5. xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD

    En frente de un colegio??

    Para enseñar un par de cosas no?? xd

    Jajajajaja. En fin, cuidate enano!

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  6. Yo, aunque no lo parezca, Juan, también soy chico de barrio...:P

    B. Lee, que me vean le da un morbo especial a la situación. Anyway, no había nada cerca salvo la obra y el cole.

    Cuando apareció el coche, Alicia, estábamos empezando prácticamente. Y ninguno somos eyaculadores precoces, jajajaja. Y sí, por fin alguien pilla el por qué de la canción. (Mi vida en novela... ya me lo pensaré).

    Yo no tengo peligro, que lo sepáis. El peligro me tiene a mí, :P

    Y sí, fue enfrente de un colegio porque en los centros de salud suele haber médicos, enfermeras y demás de guardia.:P

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